Ya han comenzado las fases de pruebas dinámicas de la evolución del 911. Y sí, todo parece indicar que será más efectivo y divertido que nunca…
Porsche trabaja a fondo en la renovación de su modelo por excelencia, el 911 conocido con el código interno 992. Así, no es de extrañar que nuestros espías ya se lo hayan encontrado tanto en los parajes nevados del norte de Suecia –donde se llevaron a cabo una serie de pruebas hace semanas– como en el circuito de Nürburgring, tal y como hemos visto. El objetivo no es otro que poner a punto toda una evolución técnica que requiere de mucha inversión económica y grandes esfuerzos por parte de los ingenieros.
Un Porsche 911 híbrido y más efectivo
Los cambios exteriores de este prototipo de pruebas en particular se limitan a un nuevo faldón delantero con tomas de aire y luces de circulación diurna muy camufladas, aunque rediseñadas. La parte trasera del automóvil parece no exhibir ningún cambio con respecto al modelo actual, pero esto podría cambiar a medida que se intensifique el trabajo de desarrollo sobre el vehículo durante los próximos meses. Sería lógico pensar, además, en nuevas llantas y colores de pintura para la carrocería.
Aunque el automóvil que se muestra en Suecia aún no parecía tener el nuevo sistema de propulsión híbrido debajo del capó, la tecnología de electrificación definitivamente está en marcha. De hecho, su llegada está prevista para la actualización que vemos en estas imágenes. Según nuestros espías, el 911 híbrido utilizará un sistema eléctrico de 400 voltios en lugar de un sistema de 800 voltios que usa el Taycan. El sistema de voltaje más alto se adapta mejor a la carga rápida, que no es necesaria para un híbrido que tendrá una batería más pequeña.
La unidad de pruebas que hemos visto rodando ‘a fuego’ en el mítico Infierno Verde tampoco nos da pistas sobre esta hibridación, así que de momento, todo es posible. Sí parece que la motorización escogida es bastante potente a tenor de la velocidad que lleva el piloto de pruebas de la marca, con pasadas, según nos dicen, verdaderamente estratosféricas y al más puro estilo Gran Premio.
Modificaciones sutiles pero importantes
Lo que no está claro es si el automóvil contará con un enchufe para reponer la energía eléctrica o si dependerá únicamente de una combinación de la potencia del motor y la energía de frenado (y posiblemente la energía de escape) de regeneración. Es probable que Porsche opte por una solución híbrida enchufable, de modo que el automóvil pueda ofrecer una autonomía eléctrica decente, una necesidad en las ciudades que requieren cada vez más que los vehículos tengan modos de emisión cero emisiones.
En cuanto al motor eléctrico, probablemente estará integrado en la transmisión. El exjefe del 911, August Achleitner, ha comentado que la transmisión de doble embrague de ocho velocidades del 911 de la generación 992 es la misma unidad que se usa en las versiones híbridas del Panamera. A pesar de que el 911 Turbo S E-Hybrid será el tope de gama del futuro, se espera que el restyling se realice en todos los modelos de la gama, incluido el Turbo de gasolina que acompaña estas líneas.
